VIGILANCIA: ENTRE LA PREVENCIÓN Y EL CONTROL

Preventivamente, mediante la vigilancia y el control, los guardias privados se anticipan de modo de no actuar sobre los hechos consumados. De ahí que resulten imprescindibles en la prevención de delitos o de situaciones que impliquen peligros contra las personas y los bienes.

Por eso mismo, es insuficiente la custodia de agentes armados y no es casual que, por lo general, mediante llamados a licitación, se solicite la participación de la seguridad privada en ámbitos públicos.

A pesar de la disponibilidad de policías para organismos oficiales, los guardias se desempeñan marcando una diferencia fundamental por su observación, recorrido y atención en alerta permanente.

De ahí que se incrementen día a día los requerimientos de parte de entidades estatales para contratar servicios de vigilancia y control privados, aun cuando esas dependencias puedan disponer del concurso de policías.