Archivo de la etiqueta: controles

CONTROL Y PREVENCIÓN EN CONJUNTOS INMOBILIARIOS

En countries, clubes de campo y barrios cerrados (los “conjuntos inmobiliarios”, según la denominación del nuevo Código Civil y Comercial), los vigiladores privados deben controlar, por lo pronto, el ingreso y egreso de transeúntes y automóviles. Es, por así decirlo, su presencia de primera instancia en ese tipo de urbanizaciones.

Los procedimientos en este sentido han de ser minuciosos y consisten, en esa primera instancia, en verificar la identidad (nombre y apellido, número de DNI) de las personas ajenas al lugar; los motivos por los cuales concurren, a quiénes buscan y a qué vivienda se dirigen, así como también las chapas patentes, si accedieran en vehículos.

Con un enfoque preventivo en sus tareas, los guardias controlan que no se produzcan situaciones fuera de lo normal o atípicas, que de alguna manera impliquen riesgos para personas y bienes del lugar, o que representen una ruptura de los códigos de convivencia.

La vigilancia debe extenderse, en rigor, a través de rondas permanentes mediante las cuales se observan las viviendas y los vehículos estacionados, así como también cualquier irregularidad que ameritara dar aviso a los dueños o advertir sobre movimientos extraños.

Los controles de una vigilancia integral abarcan todo el perímetro del lugar, adonde, además de asegurar que las personas que circulan estén autorizadas, se verifica el buen estado de piletas, quinchos, entre otras cosas.

FRENTE AL TEMOR, MÁS VIGILANCIA PRIVADA

Atemorizados por la escalada delictiva, y por la inseguridad adicional que se verifica durante la pandemia del coronavirus, propietarios e inquilinos han reforzado los sistemas de prevención y control en los ingresos a los edificios de Córdoba.

En efecto, han colocado rejas y sistemas electrónicos para evitar el ingreso de intrusos. Sin embargo, la proliferación de hechos delictivos al interior de los complejos demuestra que esas medidas resultan insuficientes, tanto más si no se cuenta con vigiladores privados.

Vecinos y porteros de consorcios ubicados en distintos puntos de nuestra ciudad -con prevalencia de los situados en el Centro, en los barrios Nueva Córdoba, Alberdi, Alta Córdoba, Cofico y General Paz- han reiterado sus advertencias sobre esas situaciones de inseguridad, en especial por los robos perpetrados en departamentos.

De todos modos, la instalación de cámaras de seguridad no ha disuadido a los malhechores y ha servido, a lo sumo, para observar los hechos consumados, sin siquiera poder identificar a quienes perpetraron los atracos.

En ese contexto, los consorcistas reclaman, además de mayor presencia policial, vigilancia física permanente, en la medida en que los agentes estatales, aun con el incremento de patrullas callejeras, no garantizan, sea cual fuere la franja horaria, la protección de bienes y de personas.

La necesidad de seguridad privada no es antojadiza: los robos se han multiplicado y se han presentado en diferentes modalidades, como, por caso, el uso de llaves magnéticas de acceso por parte de personas ajenas a los edificios; el aprovechamiento de terrazas y de los movimientos desprevenidos en cocheras.

En todos los casos, los consorcios cuyos reaseguros han sido vulnerados no disponían de la presencia de vigiladores, que, como lo demuestra la experiencia, hubiesen brindado controles más precisos y efectivos.

EDIFICIOS BIEN VIGILADOS

En el marco de las medidas de confinamiento por la cuarentena o en situaciones normales, los procedimientos y protocolos de seguridad, las tareas de los guardias en los consorcios no deben reducirse a la vigilancia y control de los ingresos y egresos, sea de inquilinos y propietarios, sea de personas extrañas al lugar.

Deben extenderse también a otras verificaciones que habitualmente en los edificios se consideran reservados al portero, en horarios en que éste no se encontrara.

Los vigiladores que se precien también se encargan de recorrer el edificio regularmente y verificar que no se presenten anomalías de ningún tipo, lo que incluye la revisión diaria de tableros eléctricos, la bomba de agua, los ascensores, las luces de emergencia, los matafuegos, la puerta de la terraza y la sala de operaciones, entre otros elementos que conciernen a la seguridad integral.

Si en sus rondas advirtieran algún problema o riesgo, los guardias tienen que comunicarse telefónicamente con las empresas contratadas para el service correspondiente, mientras garantizan que ninguna circunstancia afecte a propietarios o inquilinos.

Del mismo modo, al recorrer los paliers de cada piso, constatan que no haya ruidos molestos, humo, olor a gas o cualquier situación que resultara llamativa o fuera de lo común.