LA VIGILANCIA PRIVADA VALE…

Frente al incremento de las expensas y las complicaciones en los consorcios derivadas de la pandemia por el coronavirus, y hay quienes afirman que los servicios de seguridad privada representan el mayor porcentaje en la composición de los costos. Nada más lejos de la realidad respecto de esta prestación que resulta esencial en cualquier situación, sea normal o excepcional.

Lo cierto es que la vigilancia privada vale… Plantea consideraciones de valor, no de precio, porque se trata de un servicio imprescindible para la tranquilidad de la vida consorcial, en la medida en que la presencia de vigiladores implica la atenta protección de personas y bienes.

Teniendo en cuenta el aumento exponencial de los hechos delictivos y, por lo tanto, el de los riesgos, la vigilancia, la prevención y el control resultan una inversión que, en todo caso, se mide por su valor diferencial y no meramente por el precio.

Esa necesidad se verifica no ya sólo en consorcios: incluye , residencias particulares, countries, barrios cerrados, empresas e instituciones.