CON MIEDO A LA INSEGURIDAD

En tiempos de pandemia por la enfermedad del Covid-19, el virus de la inseguridad se propaga de manera inquietante, hace estragos y su daño es considerable.

El miedo al delito, en sus distintas formas, es compartido mayoritariamente por todas las clases sociales: 9 de cada 10 connacionales se consideran potenciales víctimas de la delincuencia.

De ahí la necesidad de ser precavidos en ese sentido y, por lo tanto, el incremento en la demanda de vigilancia como un antídoto, por así decirlo, frente a un contexto de excepcionalidad que ha generado situaciones incluso de mayor riesgo.